Por Roberto Vega Andersen
En la tarea de editar cada número de esta publicación, la escritura de la editorial me sitúa ante las horas cruciales de los cierres en la redacción de un diario. En los días previos, siempre busco señales internacionales y locales que vayan en sintonía con los temas que interesan a nuestros lectores y con la entrega ya definida, disfruto del ritual de sentarse frente a la computadora y acompañado de unos pequeños apuntes, dejar correr el pensamiento y acercarles una especie de cardiograma de sentires, de alegrías y pesares.
Esta vez, la encrucijada cultural que vive nuestro país capta el máximo interés, y lo comprendo. Es que el nuevo gobierno del presidente Javier Milei presentó a pocos días de asumir una catarata de iniciativas que, en el espacio cultural, prometía el cierre de instituciones de relevancia, como el Fondo Nacional de las Artes y el Instituto Nacional del Teatro, afectando además otras áreas vitales, como el Instituto Nacional del Cine y Artes Visuales (Incaa), y la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (Conabip). E incluso, propone derogar la ley del libro que, para la inmensa mayoría de los actores del sector, tornará más vulnerables a las pequeñas editoriales y librerías profesionales, favoreciendo la venta en la red y en las grandes superficies, y limitando además la bibliodiversidad que hoy nos distingue.
Estas medidas proyectadas despertaron tal nivel de reclamos que en buena parte sufrieron modificaciones en las iniciativas del Ejecutivo, aunque aún permanecen en estado parlamentario y en algunos casos, se las aborda como si fueran “moneda de cambio” en las negociaciones por las sustanciales transformaciones económicas que impulsa el oficialismo. Todas bajo la decisión de eliminar el déficit fiscal, ese cáncer que ha acompañado a los gobiernos argentinos de las últimas décadas.
Dicho esto, y con las disculpas ante los lectores que nos siguen allende las fronteras de Argentina, les anunciamos un número rico en temas: arte, artesanías, coleccionismo, vanguardias históricas y patrimonio cultural se suceden en las páginas siguientes, siempre con la sapiencia de los autores convocados: Sonia Decker, Irina Podgorny, Ma. Gabriela Vázquez Moreno, Regula Rohland, Denise Reyna Berrotarán, Guillermo Palombo, Abel Alexander, Guido Chester, Carlos Abel Tellechea, Sebastián Hidalgo Sola y Guillermo Vega Fischer.
Por nuestra parte, retomaremos la senda en marzo; como en años anteriores, en febrero llegará el momento de gozar con la pausa anual.
¡Que la disfruten!